Empezó con una llamada desde una revista canadiense que invitaba a luchar contra el poder financiero. Al principio fueron sólo 300 personas ( y eran BLANQUITOS) pero se fueron sumando (con la ayuda de varios españoles con experiencia en el 15-M) más y más hasta cortar el puente de Brooklyn.
Es ya imposible negar lo evidente: la bronca social está en la calle: primavera árabe, ciudades griegas, calles israelíes, estudiantes chilenos, indignados españoles...cada movimiento con sus características diferenciadoras. ¡¡EL MUNDO ESTÁ ENOJADO!! Ahora vamos a ver como se organizan y si de verdad pueden cambiar algo...pero al menos no son como borregos camino del matadero. Ya sabemos cuáles son los verdaderos criminales en este cuentito, ahora hay que ver si se les puede quitar su inmenso poder. Y, como siempre aparece la incómoda pregunta: ¿Cómo?, ¿CÓMO?, ¿Cómo se hace para que una revolución no termine machacando a todo el mundo como el fascismo, el nazismo, el comunismo y qué se yo cuántos "ismos" más, como dice Günter Grass?
Creo que esto es como la molécula de ADN, una hélice que es una serie de círculos abiertos que regresan casi al mismo punto...casi, porque siempre algo es distinto en ese nuevo punto y ojalá este nuevo punto sea el nacimiento de otra etapa histórica porque ésta ya se agotó, se corrompió y se degeneró. Los poderosos que se llaman a sí mismos demócratas han dado la espalda al pueblo, se han burlado y han engañado. EL SISTEMA TIENE GANGRENA.
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