miércoles, 16 de agosto de 2023

GATO EN UN PISO VACÍO

 

"Morir, eso no se le hace a un gato.

Porque qué puede hacer un gato

en un piso vacío.

Trepar por las paredes.

Restregarse entre los muebles.

Parece que nada ha cambiado

y, sin embargo, ha cambiado.

Que nada se ha movido,

pero está descolocado.

Y por la noche la lámpara ya no se enciende.

Se oyen pasos en la escalera,

pero no son ésos.

La mano que pone el pescado en el plato

tampoco es aquella que lo ponía.

Hay algo aquí que no empieza

a la hora de siempre.

Hay algo que no ocurre

como debería.

Aquí había alguien que estaba y estaba,

que de repente se fue

e insistentemente no está.

Se ha buscado en todos los armarios.

Se ha recorrido la estantería.

Se ha husmeado debajo de la alfombra y se ha mirado.

Incluso se ha roto la prohibición

y se han desparramado los papeles.

Qué más se puede hacer.

Dormir y esperar.

Ya verá cuando regrese,

ya verá cuando aparezca.

Se va a enterar

de que eso no se le puede hacer a un gato.

Irá hacia él

como si no quisiera,

despacito,

con las patas muy ofendidas.

Y nada de saltos ni maullidos al principio".


"Un gato en un piso vacío ", Wislawa  Szymborska

Cuando el poeta Kornel Filipowicz murió en febrero de 1990 Szymborska le dedicó un epitafio, uno de sus versos más conmovedores: “Un gato en un apartamento vacío”.

Tiempo después, en una entrevista, ella comenta el poema: “Ese gato -que debe acostumbrarse a vivir en un piso donde ya no está su amo, muerto- es una herida grande en mi corazón.

Ahí hablo del dolor por la pérdida de mi compañero, mi gran amor, el poeta Kornel Filipowicz, fallecido en 1990; no es sólo el gato el que está triste sino también yo”.

2 comentarios:

  1. Que horrible es quedar solo y desamparado
    Beto

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  2. Me abruman los comentarios de gente que pide cuidar de mascotas a las que se les han fallecido sus dueños. Mis mascotas morirán antes que yo. Es un hecho que debo cumplir. No adopto animales que no podré cuidar enfermo o muerto. Es lamentable, pero si pudiera adoptar en mi senectud, sería un animal en mis mismas condiciones. Exceptúo a los accidentes en el devenir de la vida, también un lastre sentimentalmente engorroso. Da para un debate.

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