miércoles, 8 de junio de 2022

244 5988

 "Era perfectamente natural que te acordaras de él a la hora de las nostalgias, cuando uno se deja corromper por esas ausencias que llamamos recuerdos y hay que remendar con palabras y con imágenes tanto hueco insaciable".

 Julio Cortázar

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Papá. Mónica Bardi.

Pasado el furor diario de las múltiples conexiones y conversaciones con amigos reales y virtuales, ella concluyó que ya era hora de desconectar y hundirse en el cálido útero oscuro de su dormitorio, relajarse, descansar y dejar a la mente para que navegue en paz. Para que haga lo que le de la gana. Así que le sacó el volumen al teléfono  móvil pero le pareció poco porque ahí seguía estando ese funesto y necesario aparatito, siempre atento y vigilante. "No", pensó luego, "mejor en 《modo avión》", aunque claro, es casi lo mismo. "Lo apago y listo". Mujer resolutiva. ¡Ahhhh, qué alivio! y cerró los ojos. 

Sin querer, recordó esos comentarios increíbles de que el espía en cuestión seguía oyendo si no se le quitaba la batería. "¡Paparruchas!", pensó pero encendió la luz y sacó la batería. De ninguna manera iba a creer eso que andan diciendo por ahí que tiene un chip que se activa, aún sin batería. "¡Qué estupidez", pensó pero se levantó y llevó al monstruito a otra habitación, bien lejos. "Soy tarada, si aquí nadie está hablando...¿Quién va a oír qué?". 

Y cuando iba a apagar la luz vió el teléfono fijo en la mesita de noche. Obviamente con él no había peligro. "¿No lo había, seguro?". Mecánicamente levantó el tubo y marcó el número de la casa paterna que había vendido hacía veinte años. 244-5988. Sonó tres veces y por fin atendió su padre muerto.

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Bruscamente la tarde se ha aclarado

Porque ya cae la lluvia minuciosa.

Cae o cayó. La lluvia es una cosa

Que sin duda sucede en el pasado.

Quien la oye caer ha recobrado

El tiempo en que la suerte venturosa

Le reveló una flor llamada rosa

Y el curioso color del colorado.

Esta lluvia que ciega los cristales

Alegrará en perdidos arrabales

Las negras uvas de una parra en cierto

Patio que ya no existe. La mojada

Tarde me trae la voz, la voz deseada,

De mi padre que vuelve y que no ha muerto.

Jorge Luis Borges.


6 comentarios:

  1. Muy bueno y el final sublime!!

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  2. Hermoso recordar a tu padre ,son seres que iluminan el alma ,el mío falleció hace 26 años, ahora reconozco que joven era todavía tenía 72 años ,mamá hace un año con 96 ,pero nunca tuve con ella ,la complicidad y el cariño recibido con papá, disculpa siempre voy a lo autoreferencial pero estoy en soledad ,te cuento porque te estimó con cariño

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  3. Imborrable ese nro. De teléfono q era nuestro *cable a tierra*... Nuestro de *donde venimos*.. Uff en mi caso así funcionó con mi madre.... Época q no había wassap.....ni agenda en el teléfono..... Cuantas vicisitudes para, los q emigramos....

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  4. Conexión Total. Gran cuentito.

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